El sol brillaba esa tarde
era una tarde serena
pero se cruzó el rayo en tu camino
¡qué pena!
Inmersos en su tristeza
dejas hermanos y amigos,
tierras que arando mimaste,
caminos que oyeron tus pasos
donde crecia mansa la hierba,
ovejas balando en tu ausencia,
y perro que sigue aullando
tambien su pena.
De buen humor siempre estabas
con buena o mala cosecha,
trabajaste de sol a sol
y con estrellas.
Y cuando alegre seguías
en esa tarde serena
se cruzó el rayo maldito
querido Isma, tan joven
¡qué pena!
Félix.
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3 comentarios:
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¡qué pena!
Félix, como siempre, pleno de sentimiento. Un abrazo, Salva.
yo también quiero dar mi pésame ha la familia de ISMAEL mi quinto,descansa en paz, tere carreto!
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