En Madrid a partir de los años sesenta, la urbanización de los barrios periféricos se expandió sin cesar y allí encontraron acomodo las clases obreras en unos pisos de mediana calidad, lo que redundaba también en un precio más asequible, llegando a ser propietarios en su inmensa mayoria. Estos municipios Vallecas, Carabanchel, Moratalaz, unos con más de cien mil y otros doscientos mil habitantes se incorporaron en su día a la ciudad de Madrid, en esa rivalidad con Barcelona para ver cual era más grande.
Me presenté un día en uno de esos pisos que abundan en Vallecas para atender a una persona mayor de setenta y cinco años. La señora podía deambular en su piso pero no podía bajar las escaleras y aun menos subir los cuatro pisos al carecer de ascensor, como todos los pisos de esta categoria. Me entretuve un momento charlando con el matrimonio, haciendo un poco de terapia a la vez que hacían un repaso del tiempo vivido, de lo mucho que habían trabajado y el sacrificio que conllevó la adquisición del piso donde vivían desde los años setenta. Mire usted, me dijo el marido; yo estuve trabajando de obrero en la construcción y construimos todos los pisos de la zona; este mismo, donde vivimos. Horas y horas extras llevan mis espaldas, subiendo y bajando material y aquí estamos ahora viviendo el día a día con el reuma a cuestas y otros achaques de la edad. Mi mujer no volverá a ver la calle y el día menos pensado a mi me ocurrirá lo mismo. Algunos amigos de nuestra época han marchado a sus pueblos pero la inmensa mayoría acabaremos nuestra vida aquí.
El hombre parecía resignado por el tono de voz y, consciente de su situación, asumía el destino que, como añadía: al menos tenemos el pisito y la asistencia médica que no nos falta. Me despedí de ellos mientras seguían insistiendo que tomara una cerveza o un refresco. Es un detalle que caracteriza la humanidad de aquellos que saben de verdad lo mucho que cuesta ganarse la vida honradamente.
Con el paso del tiempo descubrí otros casos similares; personas muy mayores con obesidad y otros problemas condenadas a permanecer en sus reducidos sesenta metros cuadrados. ¿Esto es calidad de vida?
Pensé durante mucho tiempo; ¿está esto de acorde con el artículo 47 del Capitulo Tercero de la Constitución? ¿y con la definición de la salud según la O.M.S? ¿Se pueden remediar estas situaciones? ¿Soluciones?, muchas, y sin apenas coste para el erario público. Se me ocurre un canjeo por ejemplo; que el Ayuntamiento aloje a esta gente en el bajo de los de nueva construcción y que los jóvenes accedan a estos pisos sin ascensor por un módico precio. Pienso en el señor que construyó lo que llegaría a ser su vivienda sin sospechar que la vejez los confinaría a vivir como el pájaro en una jaula de oro pero jaula al fin y al cabo, sin poder disfrutar de la calle, como el ave del viento.
Acabo de leer en un periódico, que en Madrid, 651 personas duermen en la calle, según el censo del Ayuntamiento. El 23% terminaron los estudios de Secundaria y el 10 % tienen una carrera.
Se han gastado cientos de millones de euros, de nuestro dinero, en promocionar la candidatura de Madrid para organizar los Juegos Olímpicos. Sin duda se volverá a intentar como si nos fuera la vida en ello y, a tenor de las encuestas, según los medios, la gente lo ve bien. Pues adelante con los faroles. Los gobernantes lo tienen muy facil. Nadie protesta. Perdón, sí, se protesta. La gente sale a la calle por motivos de futbol.
Y últimamente jóvenes asaltaron una comisaría por cosas del botellón.
Yendo al fondo del la cuestión, sigo sin ver el verdadero reparto de la riqueza y la auténtica justicia social. Félix
Me presenté un día en uno de esos pisos que abundan en Vallecas para atender a una persona mayor de setenta y cinco años. La señora podía deambular en su piso pero no podía bajar las escaleras y aun menos subir los cuatro pisos al carecer de ascensor, como todos los pisos de esta categoria. Me entretuve un momento charlando con el matrimonio, haciendo un poco de terapia a la vez que hacían un repaso del tiempo vivido, de lo mucho que habían trabajado y el sacrificio que conllevó la adquisición del piso donde vivían desde los años setenta. Mire usted, me dijo el marido; yo estuve trabajando de obrero en la construcción y construimos todos los pisos de la zona; este mismo, donde vivimos. Horas y horas extras llevan mis espaldas, subiendo y bajando material y aquí estamos ahora viviendo el día a día con el reuma a cuestas y otros achaques de la edad. Mi mujer no volverá a ver la calle y el día menos pensado a mi me ocurrirá lo mismo. Algunos amigos de nuestra época han marchado a sus pueblos pero la inmensa mayoría acabaremos nuestra vida aquí.
El hombre parecía resignado por el tono de voz y, consciente de su situación, asumía el destino que, como añadía: al menos tenemos el pisito y la asistencia médica que no nos falta. Me despedí de ellos mientras seguían insistiendo que tomara una cerveza o un refresco. Es un detalle que caracteriza la humanidad de aquellos que saben de verdad lo mucho que cuesta ganarse la vida honradamente.
Con el paso del tiempo descubrí otros casos similares; personas muy mayores con obesidad y otros problemas condenadas a permanecer en sus reducidos sesenta metros cuadrados. ¿Esto es calidad de vida?
Pensé durante mucho tiempo; ¿está esto de acorde con el artículo 47 del Capitulo Tercero de la Constitución? ¿y con la definición de la salud según la O.M.S? ¿Se pueden remediar estas situaciones? ¿Soluciones?, muchas, y sin apenas coste para el erario público. Se me ocurre un canjeo por ejemplo; que el Ayuntamiento aloje a esta gente en el bajo de los de nueva construcción y que los jóvenes accedan a estos pisos sin ascensor por un módico precio. Pienso en el señor que construyó lo que llegaría a ser su vivienda sin sospechar que la vejez los confinaría a vivir como el pájaro en una jaula de oro pero jaula al fin y al cabo, sin poder disfrutar de la calle, como el ave del viento.
Acabo de leer en un periódico, que en Madrid, 651 personas duermen en la calle, según el censo del Ayuntamiento. El 23% terminaron los estudios de Secundaria y el 10 % tienen una carrera.
Se han gastado cientos de millones de euros, de nuestro dinero, en promocionar la candidatura de Madrid para organizar los Juegos Olímpicos. Sin duda se volverá a intentar como si nos fuera la vida en ello y, a tenor de las encuestas, según los medios, la gente lo ve bien. Pues adelante con los faroles. Los gobernantes lo tienen muy facil. Nadie protesta. Perdón, sí, se protesta. La gente sale a la calle por motivos de futbol.
Y últimamente jóvenes asaltaron una comisaría por cosas del botellón.
Yendo al fondo del la cuestión, sigo sin ver el verdadero reparto de la riqueza y la auténtica justicia social. Félix
3 comentarios:
¡FELIX FOR PRESIDENT!
Y no es broma.
Ah, y con un solo ministerio: El del Sentido Común, y que todo pasara por ahí.
-Manolo-
No está mal la idea que apuntas sobre los jóvenes y su ubicación en los pisos altos. Seguro que muchas parejas lo verían de buen grado. Aún con crisis y paro se continúan pagando las viviendas a precio de oro.
No sé cuál será la salida. Lo que si sé es que, ni a los bancos ni a los inversionistas ni a los constructores, les favorece tener ese dinero inmovilizado y ya buscarán alguna manera de darle salida a esas viviendas de reciente construcción que aún continúan deshabitadas. Tiempo al tiempo.
Aquí se están vendiendo casas que en la época del dinero fácil valían 80 y hoy lo hacen por 50. Y ni por ese dinero consiguen vender. ¿Cuánto ganaron antes?
En cuanto a lo yayos que viven prisioneros porque sus condiciones físicas no le permiten desplazarse, es más de lo mismo.
Que felices son en el pueblo con sus tomatitos y demás, aparte de la compañía que se prodigan como vecinos.
Félix, por muchas vueltas que le demos, siempre pagan los mismos. Y esto no es demagogia barata, es lo que hay. Pero no quiero dar pie a temas políticos porque no creo en ese oficio. Pues da igual el bando, derechas o izquierdas, si pueden meten la mano y se llevan lo que haya en el cazo. y lo peor de todo es que nos estamos acostumbrando y lo vemos como algo habitual. Saludos Salva
Te agradezco Manolo,tu iniciativa"
" FOR PRESIDENT".Lo primero que haria seria despedir a los pelotas ,a los enchufados,a los
inutiles,a los corruptos, y añadir al ministerio que propones el Ministerio de la Música ;nos iria mejor.Por qué no soñar.Lo de la vivienda, Salva, está muy claro,será el currito de a pie quien pagará a los bancos y a todos los especuladores su voracidad.Esto no es nuevo,se puede ,creo, blanquear mucho dinero en la vivienda;recuerdo de toda la vida personas que dieron la entrada para un piso y fueron estafadas y aqui no pasa nada,y eso se repite una generacion y otra
Infindad de cosas siguen igual que durante la dictadura.El tema de la vivienda,por ejemplo.En los barrios que aludo en el relato, tambien en el barrio del Pilar ,se dieron grandes "pelotazos"
como ahora.La historia se repite porque no hay una catarsis y los que mandaban en aquella época en el plano social,no el politico,siguen mandando ahora, o sus hijos,que es lo mismo.Y los vicios persisten.Esto daria para hacer una tesis doctoral.No puedo concebir como se puede humillar tanto a la gente y como tambien la gente sigue tan mansamente el juego,pongo por ejemplo obligar a la gente,como en Madrid,que pase la noche durmiendo en la calle con sus sacos para
esperar que al dia siguiente les fuera concedida en la taquilla la oportunidad a ser candidatos a una vivienda municipal,sabiendo que solo una decima parte de los miles de candidatos seria "agraciada" con el "regalito" de una vivienda municipal,bien cara ,por cireto.
Lo primero que salta a la vista cuando llegas a España es la pasividad y la resignacion de este pueblo.Los medios de comunicación se encargan de hacer el resto.Es decir que no haya debate,que haya enfrentamiento a serposible entre dos bandos:Real Madrid - Barcelona.PSOE,PP.Catalanes contra
castellanos o a la inversa,y asi seguiriamos hasta aburrirnos.Perdón por si soy yo el
que ha aburrido.Esta página tambien sirve de terapia.Saludos.
Felix.
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