12 julio 2012

El amarillo Zarza

Cuando llega la primavera, el campo de La Zarza, nuestro campo, se viste de colores  como ningún otro de nuestro entorno. De estos colores el más extendido es el amarillo de la escoba rubia o amarilla. Esta escoba es todo un emblema. Es la planta por antonomasia de La Zarza(con permiso de la zarza que nos identifica) porque  habiendo inmigrado desde no se sabe donde es aquí, sin embargo, donde ha encontrado su hábitat natural; la tierra o la arcilla perfecta para su desarrollo y cada primavera nos regala ,para agradecernos por haberla dejado poblar el campo, su colorido único, así como sus formas que  a veces son un deleite .El amarillo en general tapiza el campo y una vez extendido el tapiz, solo queda disfrutar de este efímero periodo primaveral que, a través de la fotografía, perdura para seguir disfrutando. Félix.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Félix:
El romanticismo de tu fotografía con la guitarra y la originalidad de la pancarta que te acompaña, coronada por la florida escoba rubia, además del resto de fotografías entre ellas la de la cabaña de piedra que es un monumento cuyo valor es poco apreciado por quien debería protegerlo; son una muestra más de tu buen hacer y la inquietud que sientes por la naturaleza y su conservación. ¡Qué lástima que seamos tan pocos los que la vemos así...!
Dices que la escoba rubia (recuerdo de mi nifancia que en el pueblo tambián la llamaban escoba portuguesa), ha arraigado con energía en el suelo de nuestro pueblo. ¿Por qué será...?
Es que, Félix, aunque en vez de escobas rubias, hubiesen llegado a la Zarza cardos morunos, hubieran enraizado y florecido, o, se habrían convertido en rosas perfumadas; pues, es la esencia de la tierra la que les transmite una sabia especial que, si hiciera falta, transformaría en amapola una verdolaga para darle vida, deleite y armoniosidad al ambiente zarceño. Es lo mismo que haces tú con tu cámara: transmites vida.
Saludos, Félix y sigue tan optimista. Luis

Anónimo dijo...

Te das buena maña para la fotografía.
La flor de la escoba rubia es bonita, pero su olor no es agradable.
Su color es parecido o gual al de las que han sembrado en las medianas de las autovias, pero no debe ser la misma especie por estas últimas si desprenden un agradable aroma oloroso.
(Paco)

Anónimo dijo...

Ya sabemos que eres un fotografo artista, que le buscas sentido siempre. Personamente me inclino por la del camino con nubes en el horizonte.
Sin ninguna duda ese día al levantarte el color amarillo te estaba esperando para que le dieses con tu cámara la gloria olvidada. Y fue tal su influencia que hasta impuso su criterio a la hora de darle color al texto. Un abrazo; Salva.

Anónimo dijo...

Es cierto,Luis,que la tierra de La Zarza tiene algo de especial porque para ser un terreno,no nos engañemos, muy pedregoso,de rollos y lastras,hay que ver qué frutos más ricos entregaba la tierra,sobre todo cuando eramos chavales:¡Qué centeno!,y cebada y qué patatas y frejones o judías, ya fueran negras, marrones,blancas o pintas y esto tiene,tenia una explicación.La tierra no es ajena a la alegría del labrador que araba cantando con la yunta,el ganado abonaba la tierra y había alegría con las esquilas y cencerros y el trajín de la gente.Ahora el tractor la incomoda con su ruido y la contaminación del aire.Y es que la naturaleza es muy sabia ,como las escobas rubias,(yo también oí llamarlas portuguesas , quizás fuera su procedencia)que tienen un aroma algo agrio diría yo,nada agradable en todo caso,para que nadie las corte en ramilletes y se las lleve a casa.Algunas ovejas ramonean algo pero su flor no es codiciada por nadie, así las dejan tranquilas y se reproducen a su conveniencia.Las de las autovías son parecidas y en efecto,huelen bien pero no son tan leñosas que esa era la finalidad en la Zarza,y el amarillo es algo distinto. Un saludo.

Anónimo dijo...

El anónimo de arriba soy yo,me olvidé señalarlo.Felix.

Manuel dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Manuel dijo...

Pues, Félix, cambiamos Zarza de Pumareda por Rubia de Pumareda o también podría ir bien: Rubia de Primavera.
Las fotos…, todas a cual más interesante.
La primera lo tiene todo. Un cielo azul, azul limpio, robles, las rubias en plena floración, las piedras de la pared y portillo, las florecillas del suelo en primer plano y luego el cartel , la leyenda y cómo no el trovador y su guitarra; todo esto solo puede ser obra y composición de F.Carreto.
La segunda, no parece el porte y silueta de esa rubia muy de la Zarza, aunque las hay, a la vista está; más bien parece que estamos ante un paisaje africano, donde en cualquier momento puede aparecer un león para recostarse a su sombra, o el pescuezo de una jirafa asomando por cualquier esquina (de las de arriba, claro).
La tercera, tiene mucha carga también, una gran composición. Parece un icono representativo de nuestros tiempos, con un horizonte muy negro y muchos nubarrones en lontananza. Por eso lleguemos hasta el final visible del camino, bien iluminado, y esperemos allí hasta ver qué pasa. Mientras, vayamos despacio y disfrutemos, saboreándolo, este tramo del camino.
Con la cuarta me llevé una sorpresa: Sin gafas y en miniatura veía en medio del tapiz amarillo, una pared con grandes piedras hincadas,como en algunas paredes, que luego con gafas y ampliada comprobé que eras ovejitas ¡qué bonitas!
-Manolo-

Anónimo dijo...

Las fotos son muy bonitas, pues nunca había visto tantas flores amarillas en la Zarza, a mi la que más me gusta es la escoba rubia que está sola, allí como una señorita bien vestida con su traje amarillo.
La última donde están las ovejas, creo que son labrestos, y forman una bonita alfombra amarilla, pero yo la verdad no reconozco donde están echas ninguna de las fotos, pero sea donde sea están todas muy bien.
Saludos Cari.

Anónimo dijo...

Que fotos tan preciosas, cada una tiene su encanto.....¡Colores y amores de mi tierra! ¡Como siempre genial Felix!.
Saludos. Rosa.