Andrés fue un pionero en la construcción de postes para cercar las fincas con alambradas.
en todos dejaba su impronta anotando la fecha de construcción,poniendo su nombre unas veces,otras el de La Zarza y siempre dejando patente sus inquietudes artisticas .
Aqui se pueden apreciar sus iniciales formadas con chinitas.
Todos los postes llevan la fecha donde se demuestra que tabajaba todos los dias del año.
Las vacaciones eran para otros afortunados,o quizás no tanto.
Al enterarme de su fallecimiento quiero rendirle este sencillo homenaje porque para mi ,Andrés fue un artista que trabajó en silencio, que vivió casi en silencio, digo casi porque lo recuerdo cantando mientras araba tanto con su pareja de vacas como con su caballo blanco. Allá por 1978 dediqué mis vacaciones en realizar el documental en Súper 8, sobre La Zarza y la vida de los zarceños; ahí quedó para siempre Andrés arando con su yunta, cantando, por supuesto, rodeado de tomillos y de algunas aves que seguían los pasos del arado en una secuencia bucólica del campo nuestro.
Andrés perteneció a la estirpe de artistas que partía de su padre el tío Juan “Carretero” que como se sabe era un artesano de los buenos, buenos, trabajando la madera o construyendo aquellos carros, o al menos las ruedas que yo recuerde, indispensables para las labores del campo. El tío Juan fue un artista de la madera que legó a sus descendientes esa veta de artista que todos llevan dentro, como fue el caso de Andrés. Parco en palabras era Andrés, pero no necesitaba hablar porque su buen corazón lo decía todo.
Trabajó sin prisa, pero sin pausa y quizás eso fuera una de las claves de su longevidad; digo una de las claves, porque su humildad y su bonhomía eran otras de sus cualidades, que sin duda influyen también positivamente.
Desde aquí quiero darle el pésame a sus hijas y a todos sus familiares y, en mi caso particular, siempre tendré un recuerdo especial para Andrés recordándolo por lo que fue: un hombre bueno. Félix.
Andrés perteneció a la estirpe de artistas que partía de su padre el tío Juan “Carretero” que como se sabe era un artesano de los buenos, buenos, trabajando la madera o construyendo aquellos carros, o al menos las ruedas que yo recuerde, indispensables para las labores del campo. El tío Juan fue un artista de la madera que legó a sus descendientes esa veta de artista que todos llevan dentro, como fue el caso de Andrés. Parco en palabras era Andrés, pero no necesitaba hablar porque su buen corazón lo decía todo.
Trabajó sin prisa, pero sin pausa y quizás eso fuera una de las claves de su longevidad; digo una de las claves, porque su humildad y su bonhomía eran otras de sus cualidades, que sin duda influyen también positivamente.
Desde aquí quiero darle el pésame a sus hijas y a todos sus familiares y, en mi caso particular, siempre tendré un recuerdo especial para Andrés recordándolo por lo que fue: un hombre bueno. Félix.
3 comentarios:
Bonito recuerdo-homenaje a Andrés, con estos también bonitos y curiosos documentos gráficos que hacen que no se haya ido del todo. D.E.P.
-Manolo-
El vacío que dejan las personas como Andrés en su partida, se acusa aún más cuando son muy pocas las que van quedando y menos las que van llegando; nos queda el consuelo de que otras personas como Félix, sepan exponer con tan meridiana claridad recordatoria, la autenticida de su talla.
Que tu alma halle la paz que te mereces, Andrés
Juan Luis
Gracias por la parte que me toca, Mi tio sin duda era muy trabajador, y que cantaba es cierto yo también me acuerdo, mi madre mis hermanos y yo le debemos mucho lo mismo a él que a los demás tíos que tanto nos ayudaron ha salir adelante siempre estaban dispuestos ayudar, todos están ya en el cielo y desde aquí le mando un beso muy fuerte a todos. Saludos CARI.
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